La respuesta es muy fácil: el que está hecho y preparado para tu moto y para tí. Pero esto, ¿cómo lo consigo? Tienes dos opciones, comprando un amortiguador de un fabricante de tu elección y luego enviarlo a un especialista para que te lo prepare o, para hacerlo más rápido y aún más personalizado, con un TFX. 

Ventajas de poner un TFX a tu moto Trail

Un amortiguador de TFX no está fabricado previamente y luego se adapta a tus necesidades, sino que está fabricado 100% para tí. No es un amortiguador que puedas encontrar en la tienda y llevártelo sino que se hace por encargo, a medida. De modo que todo son ventajas. Es un amortiguador que, al comprarlo, pagas el producto y la preparación, de tal manera que no tienes que ir después a un especialista para que te ponga los settings para tí.

¿Cuál es el TFX adecuado para mi moto Trail?

Lo que hay que tener en cuenta con un amortiguador es que está compuesto del cuerpo, con un muelle, en algunos modelos con la botella de nitrógeno y, finalmente, los anclajes. El cuerpo (según modelo elegido) es prácticamente igual para muchas motos Trail, desde una CRF300 hasta una KTM 1290 Super Adventure R y lo que cambia es el anclaje, que éste es específico para cada moto; solo las BMW con Telelever cuentan con un diseño diferente. 

El modelo 140 de TFX es el más básico de la marca holandesa; el 141 que lleva la botella de nitrógeno separado, que se elige en aquellas motos en los que el espacio es más limitado; o el 142, que es el tope de gama y lleva la botella pegada, pero no se puede montar en todas las motos.

Un amortiguador TFX: 4 ajustes

Antes de entrar en detalle de los ajustes, es importante entender previamente cómo funciona un amortiguador. Desde fuera vemos poca cosa, pero por dentro hay un pistón que es el que va subiendo y bajando, permitiendo que el aceite pase de un lado a otro. En función del objetivo de uso del amortiguador, se prepara de una forma u otra: los agujeros por donde circula el aceite pueden ser más grandes o más pequeños, se le aplica la configuración shim stack correspondiente (que es el nº de arandelas, tamaño y grosor de las mismas) que es el que realmente hace el trabajo técnico y físico. Pero aquí ya entramos en algo demasiado técnico. 

Cuando pensamos en suspensiones y amortiguadores, a menudo solo nos centramos en la compresión, pero son 4 los elementos que hay que tener en cuenta. Para empezar, cabe recordar que la única misión del muelle es que el amortiguador esté estirado al máximo, de forma que con el peso de la moto y la persona, se comprime y luego empuja. 

• Precarga: es una dureza inicial que se establece al amortiguador. Existe un accesorio en forma de rueda que permite ajustarla de forma rápida. Pero la precarga solo es recomendable modificarla a menudo si habitualmente utilizas la moto tanto para ir solo como acompañado y cargado con maletas. Si lo haces una vez al año, no es necesario cambiarlo. En caso de no disponer del accesorio, se puede hacer con una llave específica como esta.

• Extensión: es el movimiento de “vuelta” que hace el amortiguador, que vuelve a su posición original. Se ajusta la dureza de subida del amortiguador. Cuando lo ajustas mediante un giro de tornillo, lo que hace es cerrar el paso de aceite que hay en el pistón interior del amortiguador que hemos comentado.
• Compresión a alta velocidad: no se refiere a la velocidad de circulación sinó de la compresión. Alta velocidad es cuando haces un salto, el choque contra una piedra, subir un bordillo…
• Compresión a baja velocidad: se refiere a cómo actúa en situaciones como una curva o un cambio de rasante. 

Tanto la compresión a alta como baja velocidad se ajusta en la botella, que cuenta con dos tornillos, uno para cada compresión.

Estos ajustes se pueden hacer sin necesidad de un preparador, pero es necesario hacerlo con mucha precaución y cuidado. Se hace contando “clicks”, de modo que si no te gusta el cambio que has hecho, puedes volver al setting de inicio sin tener problemas contando de nuevo el mismo nº de clicks.

Y recuerda que todos los amortiguadores también necesitan mantenimiento. Se debe revisar el aceite interior para que siga funcionando correctamente, al menos, cada 40.000km.

En TwinTrail, a nivel personal, hemos utilizado y llevamos amortiguadores TFX en nuestras motos Trail, especialmente aquellas que utilizamos para un offroad más agresivo o para rally.

Si tienes más dudas sobre amortiguadores o suspensiones, contacta con nosotros en la TwinTrail Store.